34 Años de Cárcel por violar y matar a su hija de 11 meses

Los magistrados ordenaron tratamiento psicológico al agresor, para efectos de no repetición.

QUEVEDO (LOS RÍOS).- El Tribunal Penal de Los Ríos sentenció a 34 años y 8 meses de pena privativa de libertad a Fabricio Y. C., por el delito de violación y muerte de su hija biológica, una bebé de 11 meses de edad. El hecho ocurrió el 7 de agosto de 2019, al interior del domicilio de la familia.

La primera autopsia determinó que la menor murió por asfixia mecánica por sofocación y obstrucción de vías respiratorias y que presentó signos de violación (anal y vaginal), de características recientes y crónicas.

La segunda señaló que la menor presentaba el síndrome del niño maltratado, traumas múltiples como fracturas en el cráneo, arcos costales, fémur derecho, agresión física registrada. Según los reportes médicos incorporados como prueba documental, la menor habría sufrido desde que tenía 4 meses de edad.

 Los magistrados ordenaron tratamiento psicológico al agresor, para efectos de no repetición.
Los magistrados ordenaron tratamiento psicológico al agresor, para efectos de no repetición.

Fiscalía inició un proceso investigativo el 7 de agosto de 2019. Familiares de la menor denunciaron su muerte, ocurrida un día anterior al interior de su domicilio, ubicado en la parroquia El Guayacán, cantón Quevedo.

La menor habría fallecido asfixiada y violada, presuntamente por su padre, Fabricio Y. C., quien fue detenido el día de los hechos y puesto a órdenes de las autoridades judiciales.

El Segundo Tribunal de Garantías Penales de Quevedo, conformado por los jueces Melvin Zamora, María Elena Tobar y Guillermo Bucheli, acogieron las pruebas presentadas por la Fiscalía y emitieron sentencia condenatoria de 34 años 8 meses contra Fabricio Y.C., declarándolo autor directo y responsable del delito de violación con muerte de su hija de 11 meses de edad.

Los magistrados impusieron además una multa de 1.000 salarios básicos unificados (400.000 dólares) y el pago de 40.000 dólares como reparación integral a los familiares de la víctima, además de ordenar tratamiento psicológico al agresor, para efectos de no repetición.

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